El pasado Jueves Santo, día 5 de Abril del 2012, realizó su primer acto religioso nuestra Orden, participando en la Solemne Procesión del Jueves Santo en Porreres.
Los mantos blancos, de los Pobres Caballeros de Cristo volvieron a verse en procesión por las calles de Mallorca,en concreto en el pueblo de Porreras, antiguo enclave templario, y localidad donde se custodia una supuesta antigua cruz templaria procesional.
Los hermanos allí presentes entramos en la iglesia de Sant Felip Neri en procesión, en cabeza y portando la cruz procesional. Sentados en los primeros bancos y en laterales, junto a los Nazarenos, seguimos con gran devoción la celebración de la Eucaristía, y posterior lavatorio de pies de Nazarenos y algunos Hermanos Templarios. El momento más emocionante de la Ceremonia, fue cuando se nos concedió el gran honor de custodiar la Sagrada Forma, bajo palio, hasta el Sagrario. Lugar donde nos arrodillamos y oramos durante unos momentos.
Luego nos dirigimos a la Parroquia de Nuestra Señora de la Consolación, donde nos encontramos con las cofradías, y pudimos admirar la belleza del templo y la simpatía que nos procesaron el resto de fieles y cofrades.
Los Hermanos Templarios, llegados desde distintos puntos de Mallorca, salimos en Procesión por las calles de Porreras, hacia el Monasterio de Sant Felip, posteriormente nos volvimos a dirigir en procesión a la Parroquia de Nuestra Señora de la Consolación,la tercera más grande de Mallorca, y donde se encuentran las imágenes de los dos Juanes. Para una vez allí finalizar el recorrido y orar ante el Santísimo.
Una vez acabado el acto, los Paters, el Presidente de las Cofradías, los cofrades y los fieles nos felicitaron y nos agradecieron nuestra presencia y devoción. Muchos fueron los fieles que con admiración se acercaron a hablar con nosotros, y a pedirnos si nos podían hacerse fotos con nosotros.
Desde la OCCTJ, queremos agradecer al pueblo de Porreras y en especial al Padre Francesc, todo el calor , el cariño, el agradecimiento, el cobijo , la admiración , la fe y la simpatía que nos han demostrado.
